Ayer me costó muchísimo quedarme dormida, entre mis pesadillas recurrentes (de las que ya hablaré) y el tormentoso ruido de la lluvia y el viento, intentando dejar de imaginar que se llevaría al techo, que botaría al poste de luz que está justo al lado de mi pieza y me aplastaría a mi y a mi muppet, y que en cualquier momento vería por la ventana al cholito al que le doy comida volar por los aires. Incluso escuché un trueno (o lo que haya sido esa mierda) tan pero tan fuerte y prolongado, que hasta por un segundo pensé que un meteorito se estrellaba y que el mundo se acababa (sí, así de weona) jaja. Casi cuando veía al meteorito en mis narices, me paré de la cama temblando y con el corazón casi en la mano y corrí a la pieza de mi papá (que a todo esto, no encontró mejor momento para venir a vernos) que igual que yo chistosamente trataba de disimular su miedo y explicar que cresta había sido eso.
Al final me quedé dormida como a las seis y tanto, sólo después de haber prendido la tele, como para escuchar otra cosa que no fuera el horrible ruido de allá afuera y para asegurarme de que el mundo no se estaba acabando. Con lo que amo a la lluvia... odié está noche.
¿No escontraste una foto más triste? :(
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